El ministro de Salud, Francisco Alabí, llegó este jueves al municipio de San Vicente para supervisar la jornada de tamizaje a la población que se desarrolló en el Parque Central de dicha ciudad, donde fueron instaladas tres cabinas móviles de diagnóstico y se aplicaron 300 pruebas PCR para la detección de COVID-19.
Las personas interesadas en conocer si son portadores del virus llegaron desde tempranas horas para asegurar su cupo, siguiendo todas las medidas de bioseguridad respectivas y respetando el distanciamiento social.
Alabi pudo corroborar que la jornada se llevó a cabo de manera ordenada y segura. Durante el recorrido conversó con vicentinos, personal de salud y con el alcalde del municipio, Medardo Hernández Lara, quien agradeció por garantizar a la población el acceso a las pruebas.
«Continuemos en este periodo cumpliendo las medidas, hay que ser prudente, a la hora de salir, evitemos exponernos. No debemos estar en aglomeraciones, debemos cumplir el lavado constante. Hoy es el momento de protegernos y proteger a la familia”, instó el funcionario.
Recordó que el país vive una situación “compleja” por la pandemia del coronavirus y pidió a la población que, aunque estemos en un periodo de vacaciones, evitar exponerse para evitar que la cifra de contagios aumente.
Por su parte, la población vicentina reconoció los esfuerzos para controlar la enfermedad, pese a que no se le han brindado las herramientas requeridas para frenar el avance del virus.
“Muy acertada porque la incertidumbre de lo que está pasando y ver todo lo que sucede a nuestro alrededor nos preocupa y vemos con buenos ojos la iniciativa del Ministerio de Salud de acercarnos la prueba.
En el país se ha minimizado en comparación con otros países, gracias a Dios se tomaron medidas a tiempo”, expresó Martha Paredes.
