Salvadoreños visitan La Costa del Sol, Puerto de La Libertad y el lago de Coatepeque a pesar del riesgo de contagios de COVID19
La Policía de Turismo atiende al menos 50 denuncias diarias en esta semana por dueños de restaurantes que no están acatando las disposiciones de la fase 1 del Plan de Reapertura Económica del Gobierno Central y los empresarios. Además de grupos de personas que están visitando las playas, ignorando el riesgo de contagio de COVID-19.
La Policía ha detectado restaurantes de playa que están atendiendo a clientes en mesa, desobedeciendo lo acordado en el plan gubernamental.
En cuanto a la afluencia de vacacionistas se ha incrementado, sobre todo, en tres zonas: La Costa del Sol, Puerto de La Libertad y el lago de Coatepeque.
Los visitantes han encontrado la modalidad de alquiler de ranchos de playa para poder vacacionar entre amigos o con la familia. Sin embargo, se exponen a un alto riesgo de regresar a su casa contagiados de COVID-19.
“No están tomando consciencia del riesgo que corren, vemos cómo los números de la pandemia están cada vez más en incremento y las exposiciones al virus son un riesgo”, expresó la ministra de Turismo.
Por su parte el ministro de Salud, Francisco Alabi, enfatizó que no es tiempo de vacacionar y pidió a la población salvadoreña a guardarse en casa para evitar ser víctima del nuevo coronavirus.
«No es momento para encontrarnos en el lago de Coatepeque, no es momento para encontrarnos en la Costa del Sol ni en La Libertad», reiteró el ministro de Salud.
Ambos ministros coincidieron que es irracional que en plena fase 3 de la pandemia se organicen grupos de personas para visitar los diferentes centros turísticos, inclusive, a pesar de estar cerrados.
La presidenta del Instituto Salvadoreño de Turismo (ISTU), Eny Aguiñada, informó que ha recibido denuncias que vendedores de comida típica permanecen a las afueras del parque Balboa, en Los Planes de Renderos, y que los clientes se aglomeran para comprar, sin ningún tipo de medidas de prevención del virus.
De hecho, esta semana, algunos de los visitantes rompieron la cinta de seguridad para internarse en una parte del parque, una acción que está fuera de todo orden.