La Asamblea Legislativa pasó más de 40 días sin discutir ni aprobar las medidas especiales para establecer una cuarentena en todo el territorio, estricta, más un régimen de excepción pensado como medida preventiva para evitar contagios masivos.
Ahora, frente a un segundo período de vacaciones en tiempos de pandemia, los profesionales de la salud temen que la población baje la guardia y decida salir de casa para pasear. Sin una cuarentena estricta y sin el régimen, poco pueden hacer las autoridades para controlar un desbordamiento.
“Hubiera sido de trascendental importancia establecer una medida de cuarentena”, dijo Yeerles Ramírez, director nacional de Monitoreo Estratégico de Servicios de Salud.
“Veo con tristeza que no existe interés, no hay interés de poner primero la salud, de poner el bien común de la población”, agregó.
Los diputados no han querido llevar a la sesión plenaria la discusión de estas medidas, pero sí comenzaron a tener sus comisiones legislativas a través de plataformas de “streaming”, para evitar ir a su lugar de trabajo. Estas reuniones vía internet ya no se están celebrando.
Ramírez alertó a la población sobre los peligros de salir a pasear en un momento en el que el virus ya está en todo el territorio y se cuentan entre 300 y 400 casos diarios.
“Dentro de cinco a 15 días podemos tener una oleada de casos (nuevos) debido a la movilidad que están teniendo las personas en el período de agosto”, agregó Ramírez.
El Salvador tiene 18,262 casos confirmados de COVID-19 y 486 fallecidos (por causas atribuidas a la enfermedad). En tanto, 419 casos se confirmaron el martes por la noche.
Ramírez recomendó acudir a las Unidades de Salud ante los primeros síntomas del coronavirus, ya que la atención temprana mejora las probabilidades de recuperación y de evitar la hospitalización.
