Masacre en Venezuela: casi medio centenar de muertos durante un motín
La revuelta tuvo lugar en la tarde del viernes en el Centro Penitenciario de Los Llanos (Cepello), en Guanare, a 500 kilómetros al suroeste de la capital venezolana.
Al menos 46 muertos y un número indeterminado de heridos se registraron este viernes a la tarde durante un motín en una cárcel de Venezuela, informó un funcionario del penal, quien aseguró que la cifra de fallecidos «irá subiendo» porque el estado de algunos lesionados es de «extrema gravedad”.
El motín comenzó a primera hora de la tarde del viernes en el Centro Penitenciario de Los Llanos (Cepello), en Guanare, a 500 kilómetros al suroeste de la capital venezolana, según informó a la agencia EFE una fuente fiscal, quien no precisó las circunstancias en las que se produjeron los hechos.
Durante la revuelta, en la que los presos usaron armas de fuego y blancas, así como objetos punzantes y una granada, resultó gravemente herido el director de la cárcel, Carlos Toro, apuñalado en la espalda y en la región occipital, según consignó la agencia ANSA.
Además, la teniente de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) Escarlet González fue alcanzada por las postas de una granada lanzada por uno de los reclusos implicados en la reyerta.
El relato oficial describe que los presos apuñalaron en la cabeza y en la espalda al director de la cárcel y luego intentaron huir. «Los internos rompieron las rejas de seguridad del perímetro e intentaron alcanzar la calle, enviando adelante a internos desarmados y sin protección, quienes cayeron al intentar fugarse del penal«, describe de forma confusa la nota informativa de la Guardia Nacional Bolivariana.
Los heridos de mayor gravedad fueron trasladados al hospital Dr. Miguel Oraá, mientras que los fallecidos fueron llevados a una morgue improvisada en las proximidades de la cárcel en la localidad de Guanare, estado de Portuguesa, donde serán identificados para, directamente, informar a sus familiares.
«Se ha registrado presuntamente el asesinato de varios privados de libertad», develó Humberto Prado, director de la ong Una Ventana Para La Libertad y comisionado de derechos humanos de la presidencia encargada. El Parlamento ha iniciado una investigación «con el objeto de establecer la verdad y confirmar el número de muertos», precisó Prado.
Por su parte, la diputada María Beatriz Martínez dijo que los reclusos estaban en la puerta del Centro Penitenciario de Los Llanos, mientras dialogaban con el director del penal y un militar encargado de la seguridad del penal, cuando se registró el motín.
“Se pretende hacer ver como consecuencia de una fuga frustrada, pero familiares con los que he hablado dicen que el motín ocurrió por la prohibición de ingresar a la cárcel los alimentos a los privados de libertad. Ellos lo que tienen es hambre”, dijo Martínez.
La alimentación de la mayoría de los presos en Venezuela está a cargo de sus familiares. Luego de casi 50 días de cuarentena por el coronavirus, en los que se suspendieron las visitas a familiares para evitar contagios, las dificultades de movilidad que hay en el país por la falta de gasolina y las restricciones de circulación de vehículos impuestas por el Gobierno de Nicolás Maduro complicaron aún más la logística de los familiares para atender a los detenidos.
La diputada contó que los presos tenían una protesta desde temprano e intentaban negociar con las autoridades. En un momento la alteración fue mayor y un grupo intentó romper la cerca y fueron repelidos por las fuerzas de seguridad. Luego hubo dos enfrentamientos armados más entre presos y guardias.
«La situación en el hospital de Guanare tras la situación del retén (cárcel) evidencia el colapso del sistema de salud«, denunció también la diputada Larissa González. Las imágenes que se filtraron a través de las redes sociales confirman la crudeza de los sucesos violentos.
El motín se produjo en un momento en el que Venezuela vive bajo orden de confinamiento y distanciamiento social, una consecuencia de la pandemia por el Covid-19, que mantiene en alerta a todos los centros sanitarios del país.
En tanto, el Observatorio Venezolano de Prisiones denunció que el Centro Penitenciario de Los Llanos tiene capacidad para 750 reclusos pero que actualmente había 2500 presos.
Cabe recordar que en 2018, 68 presos murieron por quemaduras o balazos durante la represión suscitada en el interior de la comisaría de Valencia, a dos horas de Caracas. Un año después, una treintena de reclusos falleció en Acarigua, ciudad cercana a Guanare, también en la zona de los llanos venezolanos.
Los familiares, protegidos con tapabocas, esperan desde hace horas en los exteriores del recinto para conocer la identidad de las víctimas.