Los agentes de la CBP se sumaron a la protección de varias ciudades. “No toleraremos actos criminales contra comunidades inocentes”, dijo su director interino, Mark Morgan.
La tensión en varias ciudades de Estados Unidos se mantenía la noche de este domingo (31.05.2020), debido a la presencia masiva de militares en las calles, los toques de queda y las amenazas de más protestas violentas por la muerte del afroamericano George Floyd en Minnesota a manos de un agente de la Policía.
La noche del sábado fue especialmente violenta en las calles de Nueva York, Filadelfia, Dallas, Las Vegas, Seattle, Des Moines, Memphis, Los Ángeles, Atlanta, Miami, Portland, Chicago, e incluso la capital Washington. Rutas fueron cortadas, autos y comercios incendiados, mientras las fuerzas del orden, desplegadas en gran número, respondieron con gas lacrimógeno y en algunos casos con balas de goma.
Ante eso, el gobernador de Florida, Ron DeSantis, ordenó este domingo que 400 integrantes de la Guardia Nacionalse desplieguen en el estado para hacer frente a las protestas. Ciento cincuenta guardias nacionales están en Miramar, al norte de Miami, otros 150 en Camp Blanding, el principal centro de entrenamiento de esta fuerza de reserva compuesta por voluntarios, y 100 en Tampa (oeste de Florida), según informó Helen Aguirre Ferré, directora de comunicación de DeSantis, en un mensaje de Twitter.
Aguirre escribió que esas unidades especialmente adiestradas van a apoyar a las fuerzas policiales en tareas como el control del tráfico y de multitudes para «preservar la paz y la seguridad pública». Por segundo día consecutivo este domingo se han registrado protestas pacíficas en el sur de Florida para reclamar el fin de la violencia policial contra los afroamericanos que, en algunos casos, han derivado en incidentes.
En Fort Lauderdale, sureste del estado, las protestas acabaron con incidentes y la policía disparó gases lacrimógenos a los manifestantes para dispersarlos, pero volvieron a congregarse y aún permanecen en las calles. En Miami, al contrario que el sábado, no hubo cargas ni disparos de gases de la policía, pero sí se vivieron algunos momentos de tensión cuando grupos de manifestantes se encararon a los agentes, que no respondieron a la provocación.
«No puedo respirar”
En un determinado momento la policía anunció que la manifestación era ilegal y que iba a proceder a detener a los participantes y la mayoría abandonó la zona. Las manifestaciones surgidas en EE.UU. a raíz de la muerte de George Floyd cuando estaba el pasado lunes bajo custodia policial en Minneapolis (Minesota) llevan el lema de «No puedo respirar». Esas son las palabras que Floyd, de 46 años, dijo en el momento que un policía, que no fue detenido y acusado hasta el viernes, le puso la rodilla sobre el cuello durante varios minutos para reducirlo.
En Miami rige un toque de queda desde la ocho de la tarde (00.00 GMT) y en Tampa desde las 19.30 (23.30 GMT) hasta nuevo aviso. La misma medida fue aplicada en Washington, tras una noche de saqueos e incendios durante las protestas. La alcaldesa Muriel Bowser anunció este domingo un toque de queda y la activación de la Guardia Nacional para evitar nuevas revueltas, pese a lo cual ya se registraron algunos incidentes.
En un mensaje en su cuenta de Twitter, la alcaldesa informó que el toque de queda regirá en todo Washington a partir de las 11 de la noche (03.00 GMT) y hasta las 6 de la mañana (10.00 GMT) del lunes. También indicó que ha activado a la Guardia Nacional del Distrito de Columbia para que apoyen a la Policía Metropolitana en el control de las manifestaciones que se han producido en los últimos días y que el sábado derivaron en saqueos, vandalismo e incendios.
Pese a los preparativos de la ciudad, cientos de manifestantes se congregaron en horas de la tarde para marchar desde la Universidad Howard hacia el centro de la ciudad para iniciar la protesta. En la calle 14, ya se produjeron los primeros enfrentamientos con la policía, después de la quema de un coche patrulla, y los agentes lanzaron pelotas de goma y arremetieron contra los presentes, incluidos varios periodistas, entre ellos un camarógrafo de EFE/EPA.
Varios cientos de manifestantes se congregaron también en el Parque Lafayette, frente a la Casa Blanca, donde en los últimos días han arrancado las protestas por la muerte de George Floyd. La policía, con equipo antidisturbios, se mantiene situada tras las vallas localizadas frente a la verja del jardín de la Casa Blanca, sin que se hayan registrado incidentes.
En Nueva York, también miles de personas se echaron a la calle de nuevo este domingo para protestar. Como en las tres jornadas anteriores, las protestas comenzaron pacíficamente, con ciudadanos marchando por las calles de Nueva York portando carteles que leían «Justicia para George Floyd» o «La vida de los negros importa», y gritando el «no puedo respirar».
Sin embargo, también era palpable la indignación contra la propia policía de Nueva York, que ha sido criticada por su actuación del sábado después de publicarse en las redes sociales videos en los que se veían automóviles de las fuerzas del orden embistiendo a manifestantes o agentes echando espray pimienta en el rostro de ciudadanos con las manos en alto.
Por ello, se escuchó con insistencia la frase «NYPD, Suck my dick» o «Fuck NYPD» en las manifestaciones del domingo, que se produjeron en múltiples zonas de Nueva York, entre ellas Bryant Park, en el centro de Manhattan, o el Barclays Center, en el centro de Brooklyn.
La de Barclays Center fue una de las más numerosas, donde miles de personas se reunieron con el puño alzado y carteles que pedían la «abolición de la policía» en una zona en la que se apreciaban claramente aun los destrozos del sábado, con mobiliario urbano destruido y numerosos escaparates rotos.
CBP se une a vigilancia
Al respecto, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, en inglés) también desplegó agentes en todo el país para sumar esfuerzos con autoridades locales y federales para controlar las protestas violentas.
La CBP está autorizada a actuar en una zona de hasta 100 millas desde cualquier frontera terrestre o marítima del país, lo que abarca a dos tercios de la población de EE. UU., o unos 200 millones de personas, incluidos estados enteros como Florida. Pero en esta ocasión, explicó este sábado su director interino, Mark Morgan, lo hacen por «todo el país» a pedido de autoridades federales, estatales y locales que enfrentan las «acciones ilegales» de los manifestantes violentos.
Morgan asegura que esta misión es en «conformidad con las leyes federales», a pesar de realizarla en todo el país y no sólo en la frontera como suele ser su área de trabajo habitual. La Unión Estadounidense de Libertades Civiles (ACLU) criticó la decisión de desplegar a unos agentes de CBP que tienen un «historial de abuso y mal uso del poder».
Tres policías despedidos
Para el caso, en Atlanta dos policías fueron despedidos y otros tres colocados en labores de oficina por el uso excesivo de la fuerza en un arresto durante las protestas, dijo el domingo la alcaldesa de esa ciudad.
En una conferencia de prensa, la alcaldesa Keisha Lance Bottoms dijo que ella y la jefa policial Erika Shields tomaron la decisión después de revisar las tomas captadas por la cámara corporal de un incidente el sábado por la noche que fue publicado en línea y en las noticias locales.
«El uso excesivo de la fuerza nunca es aceptable”, les dijo Bottoms a los reporteros. Shields consideró que las tomas «son realmente impactantes”.
FUENTE: DS