ARENA publicó un comunicado en el que pide al Ejecutivo “el cese inmediato de la violencia verbal”, algo que ese partido siempre ha utilizado y a lo que sigue recurriendo para criticar al Gobierno del Presidente Nayib Bukele.
Los tricolores acusan al Gobierno de impulsar un discurso “de odio y división”, el mismo que ellos acuñan cuando se oponen a las medidas que ha impulsado la administración actual, entre otras cosas bloqueando los préstamos para la emergencia sanitaria.
El partido tricolor, que hoy pide un tono conciliador, recurre a la mentira y a los insultos para descalificar a ministros y miembros del Gabinete de Gobierno, como se ha podido ver en el transcurso de las interpelaciones a funcionarios.
Prueba de ese lenguaje de confrontación y mentiras es la creación de comisiones especiales para fiscalizar el trabajo de los ministros y para argumentar que el Gobierno tiene más de $7,000 millones a su disposición.
Además, ARENA ha montado junto al FMLN un escenario de división de poderes, inventando que el Gobierno quiso cometer un golpe de Estado el pasado 9 de febrero.
Por otra parte, los areneros señalan que el Gobierno está intentando chantajear a los diputados al no entregar los fondos del Fodes a cambio de los préstamos internacionales, pero en su comunicado advierten que solo cuando se apruebe el fondo para las alcaldías habrá un “ambiente propicio” para dialogar sobre “asuntos legislativos pendientes”, es decir los préstamos.
Esto resulta contradictorio en vista de que ese partido, junto a sus socios del FMLN y Rodolfo Parker, afectaron a sus alcaldes en un afán por asfixiar las finanzas estatales, al aprobar dos decretos contradictorios que no permiten que se transfieran los $75 millones para las municipalidades, según explicó el ministro de Hacienda, Alejandro Zelaya
No obstante, los legisladores de estos partidos están echando la culpa al Gobierno de querer atrasar esa transferencia.