La tumba del mayor Roberto d’Aubuisson fue visitada hoy por los militantes del partido ARENA, quienes siguen aferrados a su memoria y cantando la misma consigna de odio y sangre: “El Salvador será la tumba donde los rojos terminarán”. Rojos que ahora son sus hermanos en la batalla por no desparecer como institutos políticos y en contra del gobierno del Presidente Nayib Bukele.
d’Abuisson fue señalado como el autor directo del asesinato de monseñor Oscar Arnulfo Romero, y quien en una entrevista reconoció que “un tirito a cualquiera se le escapa”. Los areneros llegaron a conmemorar el año 28 de su fallecimiento, en el cementerio Los Ilustres.
Su hijo, de igual nombre, estuvo al frente de la visita y también está involucrado en el asesinato de un vendedor del mercado de Santa Tecla, cuando envió a los agentes del CAMST a disparar a los comerciantes en noviembre de 2018.
También participó de la conmemoración el todavía alcalde de San Salvador Ernesto Muyshondt, quien ventila procesos por negociar con los grupos criminales para conseguir votos para el diputado Norman Quijano, quien corrió para las presidenciales de 2014. En videos que se hicieron virales, y en poder la Fiscalía General de la República (FGR) y de la Policía Nacional Civil (PNC), se ve a Muyshondt entregando sendas cantidades de dinero a las pandillas y ofreciendo puestos claves en el gobierno, de ganar Quijano.
ARENA va rumbo a las urnas con los peores números en su historia, según todas las encuestas, incluso en las pagadas por los mismos areneros. Las casas encuestadoras coinciden en que solo un “fenómeno extraordinario” evitaría que Nuevas Ideas arrase tanto en diputados como en alcaldes. Ese fenómeno, según los analistas, puede ser un fraude entre ARENA-FMLN y su director de orquesta, el democristiano Rodolfo Parker.
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