«No podemos ignorar las tendencias y tácticas autoritarias en la búsqueda de resultados políticos», señalaron los miembros del Congreso estadounidense en la carta dirigida a Pompeo.
Congresistas estadounidenses enviaron una carta a Mike Pompeo, Secretario de Estado de los Estados Unidos, para expresar su profunda preocupación por la reciente decisión del presidente Nayib Bukele de militarizar la Asamblea Legislativa como forma de presión para que los diputados aprobaran un préstamo de $109 millones para Seguridad.
Esta acción representa un acto flagrante de intimidación política, por lo que debe ser recibida con una rápida y amplia reprimenda de parte del gobierno estadounidense.
Los miembros del Congreso de Estados Unidos también señalaron el peligro que estos actos significan para la democracia: La alarmante tendencia a utilizar las fuerzas armadas para afirmar el poder y legitimar las decisiones políticas plantea un peligro significativo para la democracia de los países de América Latina, detalla el escrito.
“No podemos ignorar las tendencias y tácticas autoritarias en la búsqueda de resultados políticos”, afirmaron los congresistas en la carta dirigida a Pompeo.
Hacemos un llamado a la administración estadounidense para que denuncie las acciones y garantice que nuestra relación con El Salvador se basa en la democracia y el respeto del Estado de Derecho, incluida la independencia de las ramas políticas del poder.
El documento dirigido al Secretario de Estado fue firmado por los congresistas Jimmy Panetta, Ilhan Omar, Mark Pocan, Jim Costa, James McGovern, Mark Pocan, Ten W. Liu, Suzanne Nonamici y John Garamendi, Gilbert Cisneros, Raúl Grijalva, Debbie Mucarsel-Powell y David Price
El periódico estadounidense The Washington Post abordó en su editorial web del 12 de febrero, la crisis política que enfrenta El Salvador y la califica como “una alarmante violación de las normas democráticas” del país por parte del presidente de la República, Nayib Bukele, al irrumpir en el Primer Órgano de Estado con militares y policías.
En el artículo se cuestiona que “el presidente más joven de la historia” de El Salvador, que en las elecciones de 2019 “aplastó a los dos partidos que han dominado la política” desde el conflicto armado, “parece haber dejado que su éxito se le subiera a la cabeza”.
El pasado 6 de febrero, el presidente Nayib Bukele citó el Artículo 87 de la Constitución de la República para convocar al “pueblo” a que se pronunciara en contra de los diputados por no aprobar el préstamo de seguridad que requiere para echar a andar la tercera fase del Plan de Control Territorial.
Bukele recordó en su cuenta de Twitter que el Consejo de Ministro ordenó a los diputados sesionar para “definir, de una vez, su voto sobre el financiamiento” del plan de seguridad en mención.
“El artículo 167, numeral 7 de nuestra Constitución es claro y no autoriza a los diputados a agregarle o quitarle palabras. Están obligados constitucionalmente a asistir a la sesión extraordinaria. Si alguien rompe el orden constitucional, el pueblo tiene el artículo 87”, tuitió el presidente.
Este apartado 87 reconoce, entre otras cosas, “el derecho del pueblo a la insurrección, para el solo objeto de restablecer el orden constitucional alterado por la transgresión de las normas relativas a la forma de gobierno”.
“La convocatoria del Consejo de Ministros se mantiene vigente y la asistencia de los diputados es ineludible. Los diputados no serán responsables de lo que sus fracciones hagan y solo responderán por sus propias acciones. La Constitución también es clara en este punto”, publicó Bukele un día antes de que se tomará la Asamblea con el Ejército.
Funcionarios de su gobierno como el director de la Policía, Mauricio Arriaza Chicas, expresaban en sus redes sociales que estaban atentos a la orden de Bukele. “Estamos esperando órdenes de nuestro Comandante General, Nayib Bukele, y estamos dispuestos a defender nuestra patria aún a costa de nuestra vida”, expresó el ministro de la Defensa, Francis René Merino Monroy.
Cuatro días después del despliegue de la Fuerza Armada y la Policía Nacional Civil en le palacio legistativo, los senadores estadounidenses Bob Menéndez y Jim Risch pidieron un diálogo pacífico entre Nayib Bukele y la Asamblea Legistativa.
“Seguimos profundamente preocupados por el despliegue del presidente Bukele de las fuerzas armadas para abordar una disputa política con los legisladores”, explicaron en un comunicado.
Menéndez y Risch forman parte del Comité de Relaciones Exteriores del Senado.
Tras los hechos del 9 de febrero en la Asamblea, el Fiscal General, Raúl Melara, se reunió con los diputados de la Comisión Política y les pidió entregar los vídeos captados por las cámaras de seguridad del recinto legislativo que muestran a policías y militares irrumpir en la institución a la que Bukele llegó el domingo a conminar a los parlamentarios para que aprobaran el préstamo de $109 millones para la tercera fase del Plan de Control Territorial.
También confirmó que ha abierto una investigación sobre la militarización de la Asamblea Legislativa.