Los diputados Manuel Flores, Rocío Menjívar y Gustavo Acosta anunciaron la presentación de una pieza de correspondencia en la que solicitan a la Asamblea Legislativa se integre una Comisión Especial para que investigue y dé seguimiento a los datos que proporciona el Ejecutivo sobre las víctimas fallecidas por el COVID-19.
Con esta pieza, se pretende que los salvadoreños «cuántas víctimas reales existen en el país, cuánta gente ha fallecido a causa del Covid-19, cuántos se han contagiado y cuál es el plan de acción que se ejecuta desde el Ministerio de Salud para el acompañamiento de las víctimas», explicó el diputado Manuel Flores. Además, piden recomendar al Órgano Ejecutivo la construcción de un monumento a las víctimas del COVID-19. «Nuestra nación debe honrar a las víctimas de Covid-19 como lo están haciendo en otros países”, aseguró el parlamentario.
En una segunda pieza de correspondencia, la diputada Dina Argueta solicita se recomiende al Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales que, de manera urgente, agilicen los permisos medio ambientales que el Concejo Plural del Municipio de Quezaltepeque del departamento de La Libertad está requiriendo de manera urgente para la construcción de un nuevo cementerio municipal, ya que –de acuerdo a la pieza de correspondencia- el que existe está a punto de colapsar.
Requieren informe por escrito del MINSAL sobre tratamiento de aguas residuales del Hospital El Salvador
Diputadas del FMLN informaron de otra pieza de correspondencia, en la que solicitan que el Ministro de Salud, Francisco Alabí, informe por escrito sobre el tratamiento que se le está dando a las aguas hospitalarias y residuales del Hospital El Salvador en el Centro de Ferias y Convenciones (CIFCO) y los planes elaborados para evitar la contaminación de la quebrada La Lechuza y las comunidades aledañas.
El documento indica “que, ante el desastre sanitario desarrollándose en El Salvador que sigue cobrando la vida de compatriotas y con el hecho propagandístico electoral al inaugurar el hospital El Salvador, se afecta una vez más los bienes naturales especialmente los mantos acuíferos y el subsuelo al lanzar aguas sin tratamiento a ríos del área urbana del gran San Salvador”.
