Javier Simán, empresario que a su nombramiento como presidente de la ANEP convirtió esa gremial en un frente de ataque y desgaste del Ejecutivo, pidió este martes “dejar el odio” y “buscar la unidad nacional” para resolver los graves problemas del país, entre ellos el desempleo.
El también exprecandidato presidencial de ARENA también ha llamado en varias ocasiones a los diputados de su partido a oponerse férreamente a los planes y estrategias del Gobierno para la contención de la pandemia.
“Ante la falta de empleo de muchos salvadoreños necesitamos unir esfuezos (sic) para sacar el país adelante. Dios ilumine a nuestros gobernantes para que dejen atrás el odio y la división y mejor busquen la unidad nacional”, escribió el arenero en su cuenta de Twitter.
El dirigente de la ANEP tampoco no pensó en la unidad y el diálogo cuando, ya entronizado como presidente de la gremial, criticó las medidas de contención de la pandemia del Gobierno, y comenzó exigir que se abriera la economía de golpe.
El empresario, incluso, ha tenido expresiones que han generado roces entre su partido, como los expresados cuando la militancia arenera decidió no elegirlo como el aspirante presidencial para 2019 y desconociendo a la autoridad tricolor.
Otra de las divisiones que él ha promovido fueron “los cacerolazos”, que un pequeño grupo de opositores del Gobierno montó en protesta por la cuarentena controlada para evitar los contagios de coronavirus, impulsada por el mandatario y que permitió salvar cientos de vidas de salvadoreños.