El exdirector del Policía Nacional Civil (PNC) y diputado de ARENA, Rodrigo Ávila, reconoció este jueves que el plan de seguridad Mano Dura, implementado bajo la administración de Francisco Flores, tuvo un carácter “mediático”.
De la misma forma, confirmó que cuando se le pidió asumir la Policía durante la administración de Antonio Saca, puso como condicionante que no se volviera a hablar más de dicho plan de seguridad.
“Siendo viceministro se complicó un poco el tema delincuencial y se me pidió operar nuevamente la Policía, y lo hice con la condición de que no se hablara más de temas como por ejemplo el Plan Mano Dura, que era un tema eminentemente, yo diría, mediático”, sostuvo el legislador.
Además, reconoció que cuando asumió la Policía el tema de las pandillas no se había desbordado. “Asumí la dirección de la Policía y fue cuando enfrentamos el tema de las pandillas, que era un tema tan importante pero no era el problema”, sostuvo.
Tanto el plan Mano Dura, como el Súper Mano Dura, este último bajo la presidencia de Saca, fueron anunciados con un gran despliegue y frente a las cámaras de varios medios de comunicación, pero fueron ineficaces para la reducir la cifra de homicidios.
Tampoco lo fueron estrategias como plan El Salvador Seguro, impulsado durante la administración del farabundista Salvador Sánchez Cerén, donde la cifra de asesinatos por cada 100,000 habitantes llegó hasta 103.
