El vídeo del hecho fue difundido en las redes sociales y generó polémica, pero el Departamento de Policía local defiende el actuar de su agente.
Una agente de Detroit, EE.UU., mató a tiros a un perro en el patio de sus propietarios cuando el animal se peleó con su perro policía de la unidad canina K-9 el pasado 3 de agosto. Los animales se acercaron desde los lados opuestos de la valla que los separaba, y el perro blanco atacó al que iba por la calle.
En respuesta, la policía sacó una pistola y le disparó en la cabeza al animal que estaba en el patio, hecho por el que no afrontará ninguna sanción o castigo, reporta Detroit Free Press.
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«Su compañero estaba siendo atacado y exigimos que nuestros agentes se protejan no solo a sí mismos sino a sus compañeros y ciudadanos. En ese momento era un peligro claro y presente; su perro estaba siendo agredido de manera atroz», señaló el comandante de la Policía, Darin Szilagyi, el viernes en una entrevista con el citado diario.
«Es lamentable que llegara a esto, no nos gusta ver a ningún animal herido», agregó Szilagyi. El agente precisó que la valla de hierro forjado de 1,8 metros de altura que rodea el patio está situada justo al lado de la acera, lo cual es inconsistente con las normas de la ciudad, y subrayó que la presencia de un perro agresivo suelto pone en riesgo al público.
El hecho fue grabado por una cámara de vigilancia de la vivienda y ha generado polémica en las redes sociales. El exsecretario de Vivienda y Desarrollo Urbano de EE.UU., Julián Castro, sostuvo que el perro blanco abatido que se encontraba en su propio patio «no representaba un peligro», y que la agente perdió el control de su propio perro policía.
«Esta agente debe rendir cuentas. Debería ser despedida y procesada», escribió Castro en su cuenta de Twitter. Szilagyi, sin embargo, defendió a la policía, indicando que la reacción pública al hecho sería totalmente diferente si en lugar del perro de la unidad caninda K-9 en la acera estuviera un niño pequeño o un anciano.
